Dibujantes al ataque - Semanario Brecha

Dibujantes al ataque

La tercera edición del Premio de Ilustración de Literatura Infantil y Juvenil Uruguay viene a consolidar una forma expresiva en sintonía con el cómic y en competencia con los soportes digitales de lectura. La literatura juvenil e infantil impresa conoce un nuevo repunte a nivel regional, y los artistas son llamados a cubrir filas.

La ilustración posee una sólida tradición en la historia de la literatura uruguaya. Los años treinta y cuarenta del siglo pasado asistieron a un auge de ella, orientada en especial hacia los degustadores de poesía pero también hacia el público infantil, con puntos altos en las viñetas de Carmelo de Arzadun para los textos escolares (Alegría, Optimismo, Tierra, etcétera), las acuarelas de Adolfo Pastor para Perico, de Juan José Morosoli, y las de Amalia Nieto para Chico Carlo, de Juana de Ibarbourou, entre muchos otros. El crecimiento de la industria editorial de posguerra incitó el interés de artistas y la demanda justificó la inclusión, desde mediados de los años cuarenta hasta mediados de los sesenta, del libro ilustrado como una categoría anexa al dibujo y el grabado en el concurso del Salón Nacional de Artes Plásticas. Si bien solitaria, fue una señal importante por parte del Estado. En los años sesenta el movimiento cultural independiente, a través de la Feria Nacional de Libros y Grabados, los acuerdos entre el Club de Grabado de Montevideo y las editoriales Aquí Poesía y Publicaciones de la Universidad de la República, entre otros, vino a llenar el vacío surgido en este sentido. La dictadura barrió con todo: claro que hubo siempre relictos, como en las editoriales Arca y Banda Oriental, con el trabajo de artistas de la Imprenta As (Pieri, Ayax Barnes) y las revistas que un poco antes del retorno de la democracia pusieron el acento en la historieta, la caricatura y el humor. Esta tercera edición del Premio de Ilustración de Literatura Infantil y Juvenil Uruguay viene a consolidar esta forma expresiva que está en sintonía con el cómic y en competencia –aunque no en oposición– con los soportes digitales de lectura, y supone el apoyo renovado de las políticas de Estado. La literatura juvenil e infantil impresa conoce un nuevo repunte a nivel regional, y los artistas son llamados a cubrir filas. A juzgar por los resultados de este concurso lo han hecho de manera satisfactoria, y dos promociones de dibujantes nacidos en la década del 70 y en los ochenta (amplia mayoría) copan el campo de la ilustración dando cuenta de sobrado talento y dominio técnico.1 El primer premio para Alfredo Soderguit (1973) es un ejemplo claro, ya que combina recursos como el frottage, la acuarela y el lápiz para generar climas atravesados por un tenue onirismo y un humor más metafísico que surreal, sin que nada suene pomposo o complicado. Y sin entrar a debatir los premios –difícil trabajo para el jurado integrado por Malí Guzmán, Francisco Cunha y Diego Bianky–, todos los artistas seleccionados consiguen un nivel destacado de frescura e imaginación. Es que la ilustración se ha transformado en un refugio para que los buenos dibujantes –en especial los de tendencia figurativa– puedan desarrollar una investigación de técnicas y de formatos en diálogo con el texto, una exploración que el arte contemporáneo parece haberles vedado en su voraz consecución de ideas (en desmedro del despliegue manual y de recursos plásticos… aunque hay excepciones). La muestra marca, además, con su correcto montaje, su espacio didáctico –hay una mesa con los trabajos realizados en el marco del taller “De la ilustración al libro objeto”, a cargo de Bianky– y el interesante diseño de luces, la puesta a punto de una sala que ha tenido en los últimos meses un uso errático, sin una línea clara de exhibiciones. El catálogo bilingüe (inglés-español) de tapa dura consigue una impresión fidedigna –acorde al rubro tratado–, con esmero de diseño y textos concisos.

  1. Tercera edición del Premio de Ilustración de Literatura Infantil y Juvenil. Punto de Encuentro, San José 1116. Premios: Alfredo Soderguit, María Cecilia Rodríguez Oddone, Andrés Silva. Menciones: Leandro Bustamante, Leandro Mangado, Nelson Olivera, Luis Bellagamba, Denisse Torena, Federico Murro, Renzo Vayra, Daniela Beracochea, Macarena Campos, Augusto Giovanetti, Jorge Carbajal, Luisa Sabatini, Eduardo Sganga, Daniel Scharf, Juan Manuel Díaz, Fulvio Capurso, Claudia Prezioso de León, Felipe Echeverría, María José Pita y Alfonso Ross.

 

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