Guiones de redención en las trayectorias delictivasAl principio: “¡Uy, qué emocionante!”. Luego: “¿Qué estoy haciendo?”. Y más tarde: “¡Bueno, es lo que hay!”. Las palabras pertenecen a una de las 96 personas que entrevistó la magíster en sociología Ana Vigna, y forman parte de lo que ella y otros autores llaman el “guión de condena” de un “ofensor activo”.1 Sin embargo, más temprano que tarde la trama tiende a modificarse. Quienes desisten del delito reescriben su guión y lo transforman en uno de redención. En esta línea, la investigadora señala que existen dos “guiones de redención” en los que pueden agruparse los relatos. Uno de ellos es el del “pecador convertido en santo”. Algunas comunidades religiosas ensayan la “cura geográfica”, o el aislamiento, y brindan trabajo y vivienda a pe...
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