Segregación, sentimiento de fracaso, depresión, enfermedades psíquicas y un rosario de tristes carencias acompaña a la mayoría de las personas que durante su infancia crecieron en centros de internamiento, alejadas de sus familias. Allí, el afecto y la contención, indispensables para un desarrollo sano, brillan por su ausencia. Esto es lo que argumentan quienes sostienen que tras el naufragio del modelo de asisten cia institucionalizada es necesario encontrar nuevas alternativas. Entre ellos, la campaña europea Opening Doors (Abriendo Puertas) busca el compromiso de los gobiernos para pasar de un modelo basado en el cuidado de los niños en instituciones a otro basado en las familias y las comunidades, con el cierre definitivo de los centros de internamiento.
“Los niños necesitan una famil...
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