Fue una noche de buena música y varios homenajes, una noche para celebrar 30 años de periodismo independiente y de izquierda.
Lo que sigue son las palabras con las que Nilo recibió el merecido homenaje a esta “vieja” luchadora.
“Siempre es difícil recibir un reconocimiento que va dirigido a otra persona; particularmente cuando el homenaje va destinado a una mujer como Luisa Cuesta, la responsabilidad parecería mayor.
En estas pocas palabras trataré de ser absolutamente fiel a su modo de ser, decir y pensar; en definitiva, ser fiel a los significados de su vida, pues creo que es la mejor forma de representarla.
Luisa abrazó, con la intensidad propia de su amor y valentía, la causa de Familiares de Detenidos Desaparecidos, que no sólo es la causa de la asociación, sino que es la lucha compartida por todos quienes encuentran su compromiso vital en la defensa de la vida, la libertad y la justicia, y asumen incansablemente la condena a la impunidad en todas sus formas.
Así, nos enseñó el camino de no negarse a hablar con nadie ni rechazar el debate, sabedora de que en ello jamás se debe claudicar en los principios éticos que orientan y legitiman el actuar y la lucha. Siempre ha dicho lo que tiene que decir de frente y sin vueltas, y de esa forma enfrentó –cada vez que fue necesario– los embates de los poderosos, de ayer y de hoy.
Hoy por hoy diría sin resquemor alguno que es una vergüenza nacional y una afrenta a los valores republicanos que han vertebrado nuestra sociedad que, pasados ya 30 años del retorno a la democracia y en el transcurso del tercer período de gobierno del Frente Amplio, sean aún los familiares de las víctimas y la sociedad civil quienes deban sostener –día a día– la lucha por verdad y justicia, enfrentando el pacto de silencio de los militares, que resulta apoyado por un ministro de Defensa que los defiende y se atreve a calumniar y condenar a las organizaciones de derechos humanos.
Seguramente están esperando que la muerte, en su quehacer implacable, resuelva el problema.
Pero se equivocan quienes así piensan, pues la vida –también en su quehacer implacable– trae nuevas generaciones activamente movilizadas, que no sólo continuarán la lucha contra la impunidad para asegurar que el Nunca Más se consolide más temprano que tarde, sino que construirán su propio camino en todas y cada una de sus reivindicaciones. Y de este destino Luisa jamás ha dudado.
Creemos que no es por mera casualidad que Brecha, que es parte del periodismo independiente de este país, haga este reconocimiento a Luisa y a través de ella a nuestro colectivo y a todos nosotros.
Por el contrario, queremos creer que es este un reconocimiento al pensar independiente y crítico, forjado en la valentía y en la esperanza de que la rebeldía es aún posible en nuestra sociedad y, claro está, en la profunda convicción de que no hemos perdido la capacidad de soñar con la utopía de un mañana más justo.”
FOTOS: Artigas Pessio.