João Canijo viene de filmar una nueva película y está esperando a arrancar la posproducción. El filme trata sobre las tensiones entre un director varón y actrices mujeres envueltos en una serie de ensayos para una obra de teatro. Quería evitar el cliché de las películas sobre rodajes, dice. A la espera de iniciar el montaje, Canijo visitó, entre otros países de la región, Uruguay, donde presentó en Cinemateca Uruguaya su reciente díptico de Mal viver y Viver mal. La influencia de la tradición dramatúrgica en ambos filmes es insoslayable: desde diferentes perspectivas, ambos se mueven por los intersticios intimistas de individuos que se encuentran encerrados en un hotel. En Mal viver se observa a la familia que trabaja manteniendo el establecimiento; en Viver mal, Canijo salta a la perspect...
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