Cinco relatores de la Onu designados por el mismo Ban para investigar el origen del brote, que afectó a más de 700 mil personas y mató a más de 9 mil, llegaron a la conclusión de que la epidemia la desataron cascos azules nepaleses que contaminaron las aguas de un lago utilizado por la población con diversas finalidades (beber, bañarse, lavar la ropa, regar). Los soldados provenían de una zona de su país en que el cólera es endémico. Esa enfermedad había sido erradicada de Haití 150 años atrás. La negativa reiterada de Ban Ki-moon a admitir la responsabilidad de sus tropas y su insistencia en que la Onu no está obligada a indemnizar a las víctimas civiles constituyó en los hechos una denegación de asistencia a los afectados ,“socava la reputación de las Naciones Unidas, pone en cuestionamiento el marco ético dentro del cual operan las fuerzas de mantenimiento de la paz y desafía la credibilidad de la organización como una entidad que respete los derechos humanos”, consideraron los cinco expertos. Según el diario británico The Guardian, el panel de especialistas “trazó el origen del brote hasta el río Meille, que encontró haber sido contaminado con la cepa asiática del cólera como resultado de los desechos humanos que se vertieron directamente en el afluente. En 2013, el mismo panel concluyó en una ‘preponderancia de la evidencia’, que los portadores de la bacteria eran los cascos azules de Nepal estacionados en el cuartel Mirebalais cercano al río”. El cuartel utilizado por las tropas nepalesas en Haití no tenía instalaciones adecuadas de saneamiento.
El mensaje de los expertos, enviado en octubre al diplomático coreano, recién fue dado a conocer ahora, y es el primero en la historia del organismo que cuestiona directamente la gestión de un secretario general en ejercicio. Los cinco fueron designados no sólo para investigar este caso sino la situación global de los derechos humanos en el país, y el acceso de la población al agua y la vivienda.
Naciones Unidas ha sido objeto de varias demandas judiciales por su responsabilidad en la epidemia de cólera. Una de ellas está siendo ventilada en Nueva York.