Las distintas capas sociales están cada vez más distanciadas geográficamente, las familias pobres viven en la periferia de las ciudades y las de mayores ingresos pueblan el centro y la costa. Los montevideanos de clase media no envían a sus hijos a la escuela pública, o al menos no tanto como antes. En el barrio y el recreo los niños se parecen.
La brecha social que Uruguay y otros países latinoamericanos experimentan se expresa en la forma de habitar el territorio. La segmentación y la segregación urbanas, así como los procesos de gentrificación, en los que la especulación inmobiliaria desplaza de los barrios a sus habitantes más pobres, son algunas de sus manifestaciones.
No es novedad que en nuestro país y en la región la disminución de la pobreza no ha podido solucionar el problema del...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate