Las bibliotecas, instituciones conservadoras por definición, han aceptado sin mayores problemas la inclusión de nuevas tecnologías en sus prácticas. Esquivando el rótulo de obsoletas, muchas propuestas de bibliotecas públicas se caracterizan hoy por ofrecer un espacio de reunión y de creatividad, intentando posicionarse como espacios sociales más que como depósitos de volúmenes polvorientos.
Cuando surge un problema en el funcionamiento de algún objeto, al necesitar indicaciones para llegar a un lugar o para encontrar un alquiler más barato, la diferencia entre una solución óptima o al menos decorosa y ninguna solución está en la capacidad de cada uno para acceder a la información necesaria, decodificarla correctamente y aplicarla a la realidad. Soluciones posibles para la mayoría de estos...
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