Argentina - Semanario Brecha
Edición 1564 Suscriptores

Argentina

Mauricio Macri y Daniel Scioli son demasiado parecidos. Hijos dilectos de los noventa, nacieron de la mano de Carlos Menem, son empresarios exitosos, pertenecen al celebrity land y reflejan la luz conservadora con algunas difracciones.

Macri es un conservador pura sangre y no lo oculta. Por supuesto que se hamaca para caer bien parado en el campo de los logros K –como el matrimonio igualitario, o la asignación universal por hijo–, pero no deja de ser el espejo de una nueva capa empresarial de base clasemediera, inserta en la globalización, que necesita reglas claras. Fue ésta la que apostó por Néstor Kirchner en 2003 ante la promesa de “un país en serio”, pero poco a poco degradó su apoyo, decepcionada por la corrupción, la mano a los amigotes y un estilo político que redujo la democracia a la “mesa chica” de la quinta presidencial de Olivos y a la voluntad de La Cámpora. Macri es la nueva apuesta, con el agregado de que es uno “como ellos”.
Reflejo fiel de la nueva centroderecha, tecnócrata y posibilista, desprecia las ...

Artículo para suscriptores

Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social

Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.

Suscribite ahora

¿Ya sos suscriptor? Logueate

Artículos relacionados

Edición 2044 Suscriptores
Con los trabajadores del excentro clandestino de detención Virrey Cevallos

El sitio del delito

Edición 2044 Suscriptores
El impacto del reconocimiento en Argentina de Jorge Pedreira Brum como víctima del Plan Cóndor

Una centena de cuerpos por exhumar

Edición 2044 Suscriptores
Con Verónica Piñeiro, precandidata por el FA a la IM

De ciencias básicas y comités de base

Edición 2044 Suscriptores
OSE firmó contrato para el inicio de obras del Proyecto Neptuno

Dale que es tarde

Edición 2044 Suscriptores
Con Leonel Briozzo, futuro subsecretario del Ministerio de Salud Pública

«La salud es un terreno de disputa ideológica»