El inicio de la segunda mitad del año muestra a Jair Bolsonaro cada vez más agresivo en su discurso como presidente. Esta semana atacó al periodista Glenn Greenwald, responsable del medio que viene revelando los móviles electorales detrás de la operación Lava Jato. La constante apelación del mandatario al “enemigo interno” preocupa a organismos locales e internacionales y parece apuntar, sobre todo, a la confusión.
En la última semana, el gobierno pasó a
atacar directamente a Glenn Greenwald, editor de The Intercept, medio
responsable de divulgar las conversaciones que revelan relaciones promiscuas
entre fiscales de la operación Lava Jato y el entonces juez Sérgio Moro, y que
evidencian los fines políticos de esa operación (véase “Operación Vaza Jato”, Brecha,
14-VI-19). Primero fue el tur...
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