Que realmente muy extraño caminar la Buenos Aires de Jorge Macri, hoy capital de la Argentina de Javier Milei, para ir a la asunción del gestor uruguayo Gerardo Grieco como director general del Teatro Colón. La ciudad está terriblemente pobre. La calle está llena de personas en situación de calle, las veredas se ven y se huelen más sucias que nunca, hay muchísimos comercios y bares cerrados, es posible percibir un malestar y una violencia generales que resulta muy difícil pasar por alto. Es doloroso. En un bar en el que entré para desayunar había una sola moza para atender 20 mesas. Tardó 40 minutos en pasar por la mía. Estamos hablando del centro, de un bar del centro de una de las capitales más importantes del mundo. «Buenos Aires te espera con la luz encendida», decía un famoso comercia...
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