Mientras el hacinamiento es moneda corriente en las cárceles, el Estado paga cifras millonarias por las plazas que continúan vacías en el nuevo centro de reclusión. Faltan operadores penitenciarios, y de los que están, más de un tercio está certificado por enfermedad. Las particularidades de un modelo de gestión que despierta optimismo en las autoridades … Sigue leyendo Modelo para armar
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