La imagen que muestra al líder opositor Juan Guaidó con dos delincuentes colombianos, que le habrían ayudado a cruzar la frontera entre Venezuela y Colombia en febrero, fue el pistoletazo de salida para que los contrincantes volteasen sus cartas en el tablero político venezolano: se acabó el diálogo con Noruega como mediador y el gobierno de Nicolás Maduro comenzó a entenderse con otros opositores. Venezuela perdió esta semana otra oportunidad de conseguir un acuerdo global para superar la crisis que la agobia desde hace varios años, al quedar roto el diálogo que los principales contendores políticos sostenían con el auspicio y la mediación de Noruega. Por ahora no habrá una nueva elección presidencial ni se formará un gobierno distinto al que encabeza Nicolás Maduro, ni se reconocerán las...
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