La relatora especial de las Naciones Unidas sobre la violencia contra la mujer, la croata Dubravka Simonovic, ya le ha escrito al gobierno español al respecto. El martes Amnistía Internacional reclamó suspender la ejecución de la sentencia y el canciller uruguayo advirtió que no piensa echar del consulado a la niña que la justicia española, sostienen varios, pretende someter al “trato cruel, inhumano y degradante” que constituye la definición misma de tortura. De cómo se llegó hasta aquí trata esta nota.
“Ningún
consulado del mundo es el brazo de ejecutor de una
sentencia judicial del país donde está alojado el consulado”, explicó redondamente el canciller Rodolfo Nin a los colegas que
concurrieron a la conferencia de prensa del último lunes.
La semana anterior se había cerrad...
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