Aunque el gobierno de México justifique su política migratoria con un discurso humanitario, la llegada de la cuarta caravana migrante estuvo signada por engaños y represión. Las organizaciones sociales denuncian que la migración es considerada por el Estado mexicano como la principal amenaza a la seguridad nacional.
Unas 4 mil personas provenientes del norte de Honduras ingresaron a Chiapas,
a comienzos de abril, en otra de las caravanas migrantes que desde el año
pasado buscan atravesar México rumbo a Estados Unidos. Presionada por el
gobierno de ese país, la nueva administración encabezada por Andrés Manuel
López Obrador (AMLO) apunta ahora
a que la gente se instale en el sur mexicano, algo que fuerza mediante engaños
y el cambio de la entrega de visas humanitarias –recibidas por 18 mil ...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate