Las tensiones existentes en la Fiscalía General de la Nación (FGN) eclosionaron esta semana. Fue después de que el fiscal de Corte, Juan Gómez, decidiera el traslado horizontal de la fiscal Gabriela Fossati, lo que implicó excluirla de la indagatoria penal del caso Astesiano y de todas sus derivaciones. La resolución no fue una sorpresa. El mandamás de la FGN tenía pensado desde hacía días el traslado de Fossati, con quien había mantenido un diferendo mediático sobre los apoyos (o la falta de apoyos) destinados a la investigación. La difusión de audios en los que la fiscal dijo que no iba a «inmolarse» por una causa «en la que a nadie le interesaba la verdad» aportó el detonante final.
«El cambio lo que va a permitir es que se siga trabajando sin tanto ruido mediático […]. Si estoy acá no ...
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