«Primer gran concurso nacional cinematográfico para aficionados», se lee en un aviso publicado en el diario El País, el 26 de julio de 1929. En seguida, con letra más pequeña: «Temas libres, premios regios, jurado respetable, bases liberales». Lo que interesa es la imagen que ilustra el aviso y representa visualmente a ese aficionado del cine. Es una cámara filmadora, sí, pero sostenida por una persona blanca, joven y femenina. El afiche está reproducido en el importantísimo libro de Georgina Torello La conquista del espacio. Cine silente uruguayo (1915-1932);2 esa relación entre cámara y mujer no es excepcional. Otra publicidad, de 1924, que ofrece cámaras de marca Pathé-Baby, muestra a una mujer camarógrafa y a otra siendo filmada, jugando al tenis. También son mujeres quienes figuran en...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate