Cuando una propuesta audiovisual –por ejemplo, una serie– busca seducir a una productora, sus impulsores suelen presentar un episodio representativo, que dé cuenta del potencial de la idea y consiga el apoyo necesario para echarse a rodar. Algo similar podría representar la maniobra que dos de los partidos que integran la coalición de gobierno a nivel nacional ejecutaron la semana pasada en Canelones. En una serie que tendría como temporada final la campaña electoral de 2024, el trancazo al fideicomiso que la junta departamental se aprestaba a aprobar el martes 20 –impuesto desde los centros de poder de los partidos Blanco y Colorado– sería una primera muestra de la disputa que pretende dar la coalición en un escenario que le es adverso desde hace cuatro elecciones.
Tras el fracaso de la v...
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