Se trata de una película realmente particular, por su tema, por su clima, por su puesta en escena. Francisco Sanctis, encarnado por el actor Diego Velázquez, es un hombre casado y con dos niños que trabaja en una empresa distribuidora de alimentos, donde pese a su buen desempeño su ascenso es una y otra vez postergado. Vive con su familia en un pequeño departamento, lleva sus hijos a la escuela en colectivo, les cuenta cuentos a la hora de dormir. Francisco es contactado por una mujer que fuera compañera de estudios y de militancia en tiempos lejanos que prefiere no recordar, porque la historia se ubica en 1977, pleno reinado del terror desatado por la dictadura argentina. Casada ahora con un militar, la mujer le revela que a dos personas, desconocidas para ambos, las irán a buscar esa mis...
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