En su ya clásico ensayo Tipología de la novela policial, Todorov distinguía dos maneras distintas en las que la intriga puede tomar forma, según el interés del lector recaiga en el pasado o en el futuro del eje temporal de la “historia”. En el primer caso la intriga apela a la natural curiosidad del lector por los desconocidos antecedentes de la acción, y lo hace remontarse desde el efecto (crimen, indicios) hasta la causa (el culpable y sus motivos); en el segundo caso la intriga depende de despertar un temor en el lector por el resultado de un conflicto que comporta un riesgo o peligro para los protagonistas; el lector parte de unas causas conocidas (una situación peligrosa, un enfrentamiento, una persecución) y está a la espera de ciertos efectos aún desconocidos (resolución de la crisi...
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