Después de dos años de idas y vueltas, el Frente resolvió las cuitas de procederes irregulares de varios de sus integrantes. Cuánto influyeron los valores éticos y cuánto los cálculos electorales es una ecuación a resolver en el transcurso del camino. Por lo pronto, la 711 se siente discriminada y comenzó a contraatacar, resucitó el caso Pluna y cuestionó la gestión del gobierno, al grado de sostener que éste “hace la plancha”. En otro plano, la resolución de la dirección frenteamplista no parece ser ejemplarizante, nuevamente el diputado Darío Pérez desconoció la disciplina partidaria.
El Plenario Nacional del FA finalmente dio curso a todos los dictámenes del Tribunal de Conducta Política (Tcp) y sancionó a aquellos dirigentes frenteamplistas que han estado en la palestra pública. Obviam...
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