«Grupo Magnolio compra Radiotaxi 141 pensando que era una AM» El titular publicado esta semana por el sitio humorístico El Cascote News es una buena representación del voraz crecimiento del grupo de medios en el escenario radiofónico local. En pocos años, Magnolio ha incorporado algunas de las radios más importantes del país, consolidándose como un tercer gran grupo en el dial –los otros son Sarandí y Carve–. El 3 de marzo, el presidente Luis Lacalle Pou y el ministro de Industria, Omar Paganini, firmaron la autorización de la transferencia de Lanos SA, permisaria de El Espectador (810 AM), cuyas acciones pasaron de Julio Bernardino Arocena, Elbio Andrés Duro Von Walther y Margarita Morgan a Francisco de Posadas (con 70 por ciento de las acciones), Ignacio Abadie y Jorge Piñeyrúa (con 15 por ciento cada uno). La autorización del Poder Ejecutivo dio por cerrado el negocio de transferencia autorizado el 25 de noviembre de 2019, durante el gobierno de Tabaré Vázquez.
Los alcances del grupo en el panorama radial uruguayo y los métodos adecuados para determinarlos son objeto de controversia en el directorio de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (URSEC) y entre organizaciones sociales que siguen el tema de la concentración de la propiedad de los medios. El artículo 53 de la ley de medios dispone que una persona física o jurídica privada no puede ser beneficiada con la titularidad, total o parcial, de más de tres autorizaciones de radios, ni más de dos para prestar servicios en la misma banda de frecuencias –AM, FM y televisión abierta–, en todo el territorio nacional. Solo en la portada de la cuenta oficial de Twitter de Magnolio figuran cuatro radios (las FM Del Sol, Azul y Latina, y la AM El Espectador), lo que supera el límite legal. Pero la cantidad de emisoras que controla el grupo podría ser bastante mayor. Brecha accedió a un expediente de URSEC donde se trata la transferencia de la emisora 96.3 FM de Colonia, que es una buena muestra de las discusiones sobre el tema y las críticas que recaen sobre el accionar de esa unidad como organismo fiscalizador.
ESPEJOS
Cuando se solicita una transferencia de la titularidad de una emisora de radio cuya autorización es determinada por el Ejecutivo, previo informe de la URSEC, este organismo debe llamar a consulta pública. En una instancia de ese tipo, ante la transferencia de la 96.3 FM de Colonia, el Centro de Archivos y Acceso a la Información Pública (Cainfo) y el Observatorio Latinoamericano de Regulación, Medios y Convergencia (Observacom) solicitaron a URSEC que no recomiende la autorización de la transferencia «sin analizar, de manera previa, la posible situación de ilegalidad de esta y otras emisoras que conforman el denominado Grupo Magnolio». Las organizaciones buscaron «advertir a las autoridades […] para que esta transferencia no forme parte de un entramado jurídico tendiente a eludir la legislación nacional». Entre las radios controladas por Magnolio, Cainfo y Observacom, señalaron, además de las ya mencionadas, a Urbana FM, Azul FM, Bohemia FM (con una emisora en Punta del Este y otra en Colonia) y FM Del Sol en Montevideo, Colonia y Punta del Este (la de Colonia era la que estaba en trámite de transferencia y por la que se convocaba la consulta).
La respuesta de la gerencia de Asuntos Jurídicos y Económicos de la URSEC, fechada el 1 de marzo de 2021, da cuenta de que la titularidad de la 96.3 de Colonia corresponde a Bosquemil SA, integrada por Juan Carlos Carve Helguera como único accionista. Luego, el documento hace un repaso de las personas físicas que integran las sociedades titulares de las distintas radios señaladas, del que «surge que ninguno de sus titulares parciales de cada una tengan participación en las demás, por lo que no surgen elementos de juicio que habiliten concluir en las afirmaciones realizadas por Cainfo» y Observacom. Otro de los aspectos señalados por esas dos organizaciones es que varias radios de Magnolio comparten sede (al menos Del Sol, El Espectador y Latina funcionan en la misma casona del Parque Rodó). «Dicha circunstancia –que se configura en ciertos casos– no se encuentra prohibida por el marco normativo vigente», respondió Asuntos Jurídicos de URSEC. Cainfo desestimó posteriormente este argumento remitiendo a un antecedente en el que la propia URSEC, al investigar al grupo Sarandí, evaluó que la sede compartida era un indicio de pertenencia a un mismo grupo económico. Jurídica de URSEC también buscó circunscribir los límites de la operación analizada, señalando que trataba «específicamente de la transferencia de Bosquemil SA», titular de la emisora coloniense, «a favor de Aníbal Zeballos Aguirre, quien declara no tener relación alguna con el Grupo Magnolio» («los testaferros, si es este el caso y para eso pedimos a URSEC que investigue, siempre van a responder que no lo son», respondió Cainfo a este punto).
Pero cuando el directorio de la URSEC recibió el informe de Asuntos Jurídicos –favorable a la transferencia–, el análisis de la venta de la radio se fue extendiendo. En la fundamentación de su voto, la presidenta de URSEC, Mercedes Aramendía, destacó que, «al mismo tiempo» y «en paralelo» a esa operación, el comprador Zeballos Aguirre tramitaba la compra de Unigold SA –permisaria de la radio 96.7 FM de Maldonado–, en un expediente comenzado en URSEC el mismo día que el de Bosquemil SA. A su turno, el director del organismo en representación del Frente Amplio, Pablo Siri, criticó que el informe de Jurídica solo se refiriera a Bosquemil SA, cuando, al ser consultado por el origen de los fondos con los que haría la compra de la radio de Colonia, la documentación presentada por Aguirre Zeballos «establece que los mismos le permiten el pago de los precios convenidos […] tanto para Bosquemil como para Unigold» (o sea, los mismos orígenes para comprar la radio de Colonia y la de Maldonado). Y aquí es donde asoma el Grupo Magnolio.
Siri recordó que en 2016 y 2017 el Ejecutivo había autorizado la compra de Unigold SA por parte de Ignacio Abadie (gerente general de Magnolio) a Arturo Vargas y que, meses después, Abadie había presentado una nota al organismo solicitando la cancelación del trámite por no haberse llevado a cabo finalmente la operación. Otro antecedente sumado por el director fue que hace algunos años las radios en transferencia eran presentadas como Del Sol Colonia y Del Sol Punta del Este (la Del Sol de Montevideo es propiedad de Francisco de Posadas como único accionista) y que actualmente ambas se llaman Radio Viva y comparten el mismo sitio web. Siri también adujo que la programación de la radio de Colonia tiene dos orígenes: «Retransmiten No toquen nada de Del Sol FM (Montevideo) y el resto de los programas serían retransmisiones de FM 96.7 de Maldonado», entre otros indicios para identificar dónde radica el control de estas emisoras.
ELÉVESE
En aquella sesión del directorio de la URSEC del 4 de marzo de 2021, los directores llegaron a conclusiones opuestas. Aramendía valoró, respecto de las observaciones presentadas por Observacom y Cainfo, que «la información a considerar debería basarse en lo dispuesto en sitios oficiales. Hay muchos sitios en la web con información falsa, errónea o desactualizada». Además, agregó: «Lo relativo a Azul FM, a la existencia de un grupo económico, la solicitud de informes, así como lo vinculado a las obligaciones y competencias de URSEC, parecería no tener vinculación con el objeto del presente expediente». Por su parte, Siri reprochó a Asuntos Jurídicos que, en su análisis, «se omite» la situación planteada con Azul FM, «cuyo gerenciamiento ahora es llevado a cabo por Magnolio Group, de acuerdo [a lo que] han señalado en medios las propias personas involucradas en esta operación». El director frenteamplista solicitó que los servicios de URSEC elaboren un informe específico sobre la eventual participación de los involucrados en la transferencia en grupos económicos (figura expresamente definida en la ley de medios) con titulares de otros servicios de comunicación audiovisual, que «debe incluir informes y expedientes anteriores de la unidad que lo[s] involucren, titulares actuales y pasados, cambios de nombres comerciales y marcas, análisis de programación, portales y redes sociales, así como información de prensa que dé cuenta de cambios en la propiedad o el gerenciamiento del medio en cuestión».
Con el voto favorable de Aramendía y el voto contrario de Siri, el desempate le correspondió al vicepresidente de URSEC, el nacionalista Gustavo Delgado, que se inclinó por elevar el trámite de transferencia al Poder Ejecutivo para su aprobación. Según supo Brecha, el Ejecutivo aún no se ha pronunciado sobre la autorización de esta transferencia.