Si la marca que un escritor deja en la historia de la literatura es la impronta de un estilo propio, Truman Capote tiene ganado con creces un sitial entre los grandes autores. Desde la novela iniciática Otras voces, otros ámbitos (1948), que publicara a los 24 años, hasta ese impresionante volumen que mezcla piezas de ficción y no ficción llamado Música para camaleones (1980), por fijar un arco probable pero no cerrado, ya que desde la muerte del autor, en 1984, han aparecido varios escritos rápidamente publicados, las marcas del estilo de Capote se prodigaron para fijarse en la letra impresa, volviendo a su estilo único. Y en el centro de ese estilo está el amor, el apego, la fidelidad absoluta al detalle.
La colección de textos reunida en Retratos, que publicó recientemente Lumen, es un ...
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