Los empresarios intentaron poner contra las cuerdas al oficialismo y salieron magullados. Un nuevo round por la ley de negociación colectiva será el próximo miércoles, cuatro días antes de las internas.
Definitivamente, la lucha de clases (esa confrontación que en apariencia no existe) se trasladó a
la bucólica ciudad de Ginebra, donde algunos personeros de la poderosa
Organización Internacional de Empleadores se abstrajeron del ambiente solemne y
diplomático de la Oit
(Organización Internacional del Trabajo, de la Onu)
e intentaron una medida de corte mafioso: sobornar a la delegación sindical de
Uruguay. Si Uruguay se abstenía de la condena al gobierno brasileño de Jair
Bolsonaro, entonces lo sacarían de la “lista chica” o “lista negra”, como
pretendían nuestras Cámara de Industrias ...
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