El historial de deudas de Eduardo Lust es prolífico. Sobre el diputado de Cabildo Abierto (CA) han recaído múltiples embargos, trabados por distintos organismos, como la Dirección General Impositiva, la Intendencia de Montevideo y la Caja Notarial de Jubilaciones y Pensiones (Búsqueda, 27-VIII-20). A estos casos se les suma la deuda que consta en la Central de Riesgos del Banco Central, de 199.164 pesos, con la Agencia Nacional de Vivienda (ANV), que ameritó que fuera calificado con la categoría 5, el nivel asignado a los deudores irrecuperables que presentan operaciones con atrasos mayores o iguales a los 120 días.
«No sé por qué está eso ahí, porque ya está arreglado. Cuando falleció mi esposa, en febrero de 2019, e hicimos la sucesión, quedó ese tema ahí y después se canceló. Te agradezco el dato, porque me entero por vos. Mañana iré a la agencia y preguntaré por qué surge eso cuando ya fui. Incluso, me acuerdo de que para pagar, como el débito tiene un límite, tuve que hacer como tres operaciones juntas para llegar a la cifra», respondió Lust cuando fue consultado por Brecha. Agregó que la deuda tiene que ver con su casa en San José de Carrasco. Ante la consulta de si ya quedó saldada, respondió: «Sí, absolutamente». Sin embargo, descartó enviar a este semanario documentación que acreditara los pagos.
En la ANV no fue posible obtener información sobre la veracidad de las afirmaciones de Lust ni sobre los motivos y la evolución de la deuda. El equipo de comunicación del organismo respondió que están impedidos de «divulgar datos personales y patrimoniales de ninguna persona». La agencia es presidida por el arquitecto Klaus Mill von Metzen, de CA.
La primera aparición del «fideicomiso ANV 4» relacionada con Lust en la Central de Riesgos data de octubre de 2013 (la central actualiza sus datos mensualmente). En aquel momento, el actual legislador estaba calificado con la categoría 3 (deudores con capacidad de pago comprometida, con un atraso de entre 60 y 90 días), por un monto de 611.058 pesos. Con los años, ese monto fue disminuyendo, aunque Lust mantuvo la calificación 3 hasta 2019 (tomando mayo como referencia), lo que indica que la deuda comenzó a ser pagada con retraso.
En paralelo, el cabildante lidiaba con otras cuentas. En mayo de 2015 le correspondió la categoría 5 por una deuda con el banco Itaú y en mayo de 2017 esa misma categoría le fue asignada por una deuda con el Banco República, en el que actualmente mantiene una calificación de 1C, para «deudores con capacidad de pago fuerte», con operaciones vigentes o con menos de diez días de vencidas. En mayo de 2020 el diputado alcanzó la 1C en la ANV. En ese momento su deuda se encontraba en 305.800 pesos. Pero para noviembre ya había vuelto a la categoría 3. En marzo de 2021 llegó a la categoría 4 y en mayo de ese año, a la 5. En setiembre alcanzó de nuevo la categoría 1C, al disminuir su deuda en unos 110 mil pesos, pero recuperó la categoría 3 en noviembre, la 4 en marzo y la 5 en mayo, último dato disponible en la Central de Riesgos. El salario de un diputado, de acuerdo a la página de la Cámara de Representantes (a enero de 2022), es de 264 mil pesos nominales, más una partida de representación de 44.500 pesos.
Lust no es el primer cabildante que contradice, en los hechos, la recia honorabilidad que predica su partido. El subsecretario del Ministerio de Defensa Nacional, Rivera Elgue, también estuvo calificado con la peor categoría en la Central de Riesgos del Banco Central (véase «Mala reputación», Brecha, 23-X-20).
