Aunque murió hace más de setenta años, aunque se transformó en un autor seguido con fervor por sucesivas generaciones de lectores, de críticos y académicos, las obras de Roberto Arlt (1900-1942) siguen incompletas. Un nuevo volumen, a cargo del investigador y editor Gastón S M Gallo, recoge piezas perdidas y versiones iniciales para permitir la continuidad del asombro. Aquellos textos que no recogió en libro (varias novelas, dos volúmenes de cuentos, otros de crónicas) están mal o arbitrariamente editados, a pesar del erudito esfuerzo de Sylvia Saítta o de los empeños de Omar Borré durante la pasada década del 90. En esa calamidad Arlt no está solo. La galería de clásicos argentinos, a la que ingresó hacia 1950 por el empecinamiento de la revista Contorno, está en jirones, con excepción de...
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