Una lucha de 42 años - Semanario Brecha
Edición 1580 Suscriptores

Una lucha de 42 años

Stella Reyes les ganó 42 años a los asesinos. A las 3 y media de la madrugada del 21 de abril de 1974, Stella oyó el estrépito de los golpes en las puertas vecinas a su apartamento individual de Jacinto Vera y Estivao, en el Buceo, y tuvo la certeza de que venían a buscarla.

Stella Reyes

Alertó a la pareja con el niño que se escondía en su casa –en espera de poder trasladarse a Argentina, hartos del destrato en el cuartel– y alcanzó a dejar a la beba en el apartamento de su abuela. Treparon a la azotea mientras las órdenes retumbaban en el pasillo. La azotea estaba ocupada por soldados que al verlos comenzaron a disparar sin ton ni son, en un contagio frenético. Un megáfono ladró: “No disparen que nos matamos entre nosotros”, y eso, el miedo de que, de nuevo, una bala perforara un uniforme fue lo que la salvó, los salvó; poco después fueron ubicados y detenidos, escondidos en un galpón vecino.

Stella no sabía, esa madrugada, que una hora antes su hermana Silvia, 19 años, embarazada de tres meses, y otras dos jóvenes, Diana Maidanik (21) y Laura Raggio (19) habían sido b...

Artículo para suscriptores

Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social

Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.

Suscribite ahora

¿Ya sos suscriptor? Logueate

Artículos relacionados

Los documentos que probaron la masacre de las «muchachas de abril»

Un tardío reconocimiento

Diputado cabildante reivindicó accionar de las Fuerzas Conjuntas en dictadura

Contar otra historia

Las pruebas de la ejecución de las «muchachas de abril» en el dictamen fiscal

Balas propias

Edición 1840 Suscriptores
Tres militares imputados por caso de las muchachas de abril

Medio siglo después

Edición 1817 Suscriptores
Nueva denuncia internacional por crímenes de la dictadura

La impunidad estructural