No habrá Navidad tranquila entre la clase política de Cataluña. Las elecciones autonómicas celebradas este jueves han ratificado una realidad ya innegable: en este rincón de Europa, hay un sector considerable de la población que defiende y reclama una consulta pactada sobre el futuro de su territorio. Al cierre de esta edición de Brecha, con los votos empezando a salir de las urnas, se pronosticaba una victoria ajustada del bloque independentista, que se impondría sobre el sector unionista y conseguiría, por tanto, retener la mayoría en el Parlament.
Con el 73 por ciento de los votos escrutados, el bloque independentista retenía la mayoría absoluta, aunque Ciudadanos, la opción favorita de quienes desean seguir siendo parte de España y se oponen radicalmente a cualquier referéndum soberani...
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