“Manija” o realidad, mito o hecho, exageración o descripción: el accionar policial en las dos primeras semanas del nuevo gobierno no ha pasado desapercibido. Fue objeto de discusión en las redes sociales, las calles, los barrios y los medios. “Más presencia y más acción”, dijo el presidente, Luis Lacalle Pou, en la reunión con los jefes de Policía el día posterior a su asunción. Hay más presencia y más acción, pero la dirección de Asuntos Internos sigue, sintomáticamente, acéfala.
Era la una de la mañana. Dos jóvenes pasaron por delante de un patrullero en
Rivera Chico, barrio relativamente céntrico, cercano a la avenida que separa a
Brasil y Uruguay. Los policías actuaron: los encañonaron, los pusieron contra
la pared, les pidieron que abrieran las piernas. Uno de ellos, estudiante de
Edu...
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