La reciente beatificación del obispo riojano, 42 años después de su homicidio en plena dictadura militar, generó reacciones de la derecha.
El caso del obispo riojano Enrique Angelelli es uno de los ejemplos emblemáticos de religiosos que optaron por defender a los pobres y fueron víctimas del terrorismo de Estado en Argentina. Durante décadas su asesinato fue enmascarado como un simple accidente de tránsito, hasta que fue reconocido por la justicia como un crimen de lesa humanidad. Al cumplirse 42 años de su muerte, Angelelli recibió un reconocimiento vaticano que trajo al tapete controvertidas miradas sobre la participación de la Iglesia Católica en la última dictadura cívico-militar argentina.
Si bien el episcopado católico prestó un claro apoyo al régimen, haciendo débiles reclamos y co...
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