El relato dominante sobre el mayo francés lo describe como un gran «destape», una emancipación sobre todo cultural, ocultando las dimensiones profundamente políticas de los hechos. ¿Cómo fue posible reducir el movimiento de masas más grande de la historia moderna de Francia a un fenómeno de rebeldía adolescente?
«Que reste-t-il de ces beaux jours?», cantaba Charles Trenet en París, muchos años antes de que ese simbólico adoquín rompiera la vidriera de la sede de American Express en París el 20 de marzo de 1968 y se desataran las masivas movilizaciones que convirtieron a Francia en el emblema de las revueltas populares de 1968 en todo el mundo. ¿Qué quedó de esos días, de esa primavera francesa? Según los relatos dominantes, los oficiales y más mediatizados, lo más importante de esos suceso...
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