El martes 14 el Poder Ejecutivo decidió otorgar a cinco cableoperadores del país la licencia de telecomunicaciones clase B, que las habilita a prestar el servicio de transmisión de datos. La resolución implica desterrar el monopolio de ANTEL en la venta del servicio de Internet y habilitar el ingreso de estos cableoperadores a un negocio multimillonario, que representa buena parte de la facturación anual del ente de las telecomunicaciones.
Los beneficiarios de esta medida fueron los cables de los canales privados de Montevideo: Monte Cablevideo SA, Tractoral SA (TCC) y Riselco SA (Nuevo Siglo). También se favorecieron Korfield SA, cable de Colonia, y Praiamar SA, un operador de Pando, ambas representadas por el empresario Eduardo Bomio Clavería, propietario de Canelones Cable Visión Color ...
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