Casi la totalidad de los asistentes al espacio cultural Embajador Vicente Muñiz Arroyo, que la representación mexicana tiene en la calle 25 de Mayo, eran inmigrantes. Al iniciar la actividad, los organizadores los invitaron a marcar –en un gran mapa de Montevideo que habían colgado– los significados que asignan a distintos puntos del departamento pegando sobre ellos algunas de las etiquetas que estaban disponibles.
Ninguno se abstuvo de hacerlo y al final de la dinámica el aeropuerto reunía emoticones que lloran con otros que ríen. Los que significan hogar se amontonaron en la Ciudad Vieja y el Centro. No hubo ninguno de esos en Malvín, ni en Punta Gorda, ni en Carrasco. Los más lejanos estaban en Punta de Rieles y Sayago. Quedaron indicios de patriotismo barrial: alguien señaló especialme...
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