—¿Cómo ve el proceso de balance que inició el Frente Amplio (FA) en el que, aparentemente, la actuación del último gobierno no es una variante de análisis?
—Más allá del documento borrador, lo que uno ve son declaraciones de dirigentes en las que se muestran una serie de problemas –que yo diría hasta de léxico y de categorías de pensamiento– entre la dirigencia del FA y la sociedad, en la que incluyo a los analistas. Uno siente que hablan del FA como si fuera una estructura política que funciona en la calle Colonia y que fuera distinta al gobierno que hubo durante 15 años o, incluso, distinta a los movimientos sociales. Cuando la sociedad ve a un dirigente frenteamplista dirigiendo un sindicato o una ONG, y ni que hablar cuando ve al gobierno, piensa que eso es el FA. De la misma forma com...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate