La originalidad de su obra fue renovadora en las letras uruguayas posteriores a la dictadura: inició la vertiente que hoy frecuentamos con el nombre de autoficción. En su literatura se piensa como mujer, como escritora y como intelectual, y a partir de las emociones, el cuerpo y la escritura funda un lugar para la memoria, la reflexión y el goce estético. Después de diez años de silencio publica “El mar desde la orilla”, un acontecimiento a celebrar que invita a releer su obra.
Leemos a Alicia
Migdal porque queremos involucrarnos en la fascinación que despierta su
escritura. Siempre fue así. Mascarones (1981), Historias de cuerpos
(1986), La casa de enfrente (1988), Historia quieta (1993), Muchachas
de verano en días de marzo (1999) y En un idioma extranjero (2008)
–que reúne las últimas t...
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