La muerte de un preso del Comcar fue filmada por sus compañeros, mientras reclamaban, inútilmente, por asistencia médica. Sus patologías se veían potenciadas por las condiciones de reclusión, habían indicado a la justicia médicos de Asse, pero aun así fue mantenido en prisión. Más allá de las particularidades del caso, el hecho vuelve a poner en evidencia que las más básicas condiciones de acceso a la salud no son garantizadas a los privados de libertad.
Son tres tomas sucesivas. En el primer video,
la cámara se detiene en Ricardo, un preso que está tirado en el piso, que
apenas se mueve, que está teniendo un paro cardíaco. Los compañeros de la celda
contigua, que lo ven a través de un boquete en la pared, reclaman que acaba de
volver de la enfermería, que la Policía lo trajo a rastras y l...
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