El aforismo de Pablo Neruda: “Tú eres el resultado de ti mismo”, se aplica con justicia a dirigentes políticos y altos funcionarios de gobierno que este verano resultaron achicharrados y no precisamente por el implacable sol de este verano. La sentencia de Neruda puede complementarse con el bíblico “por sus frutos los conoceréis”, aplicable a las revelaciones sobre cuestiones éticas que sacuden la coyuntura política.
Con cierto delay, la revista estadounidense Fortune, cuyos selectos lectores se disputan los ejemplares de la edición que difunde el ranking mundial de los millonarios (seguramente para confirmar en qué puesto aparecen), en su edición web calificó al senador y ex presidente José Mujica como “Uruguay’s most unexpected champion of capitalism”, es decir, como el mayor e inesperado campeón del capitalismo en Uruguay.
El extenso artículo, que ofrece referencias para confirmar la definición del título, afirma que tras los cinco años de gobierno de Mujica, “Uruguay se transformó en el bastión de una política económica pragmática que favoreció los negocios y la inversión extranjera”.
En el vértigo de videoclip del Uruguay político, esa disonancia entre el decir y el hacer no es atributo exclusivo de Mujica, sólo que sus huellas dactilares, en las consecuencias de ese pragmatismo, no son tan evidentes como las de otros referentes. Lo que sigue a “por sus frutos…”, en Mateo 7:15-20 se ajusta como un guante en la convulsión veraniega: “Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?”.
Los rebeldes autoconvocados (productores rurales, agroindustriales, consignatarios, comerciantes y algún disfrazado de oveja) seguramente no esperaban que los perdigonazos en todas direcciones (dólar, impuestos, tarifas, combustible) dejaran en evidencia algunos extremos del engorde del Estado, que no estaban en las intenciones, como no lo estuvo algún gasto no mencionado en las críticas, como el déficit de la caja militar, por ejemplo, o el papel, tampoco mencionado, que juega el arrendamiento de tierras en las flacas economías de algunos productores.
El lema que sustituyó al histórico “aire libre y carne gorda” en la concentración de Durazno, esto es: “hay que achicar el Estado”, rebotó a tres bandas y no se salvó nadie. No parece que esa consecuencia estuviera en los cálculos de los autoconvocados, pero hoy están en el centro del análisis político las designaciones de familiares de jerarcas, ya sea a nivel de gobierno central como de los gobiernos departamentales.
Al principio, las revelaciones se centraron en los casos de nepotismo atribuidos a varios intendentes blancos, aunque la palabreja (“Trato de favor hacia familiares o amigos, a los que se otorgan cargos o empleos públicos”) gozó de un manto de pudor y prácticamente no fue mencionada. Después, el tema –ya decididamente politizado– se extendió a funcionarios del gobierno central, en una especie de toma y daca.
Algunos casos ya se venían debatiendo: la intendenta de Lavalleja, Adriana Peña, había sido cuestionada por incrementar los sueldos de los cargos de confianza de la comuna, entre los que se encontraba su pareja, Gastón Elola, director de Obras. Los cuestionamientos –que Peña atribuyó a intenciones políticas de operadores de su propio partido– obligaron a que los beneficiados renunciaran a esos aumentos. Pero ya bajo la lupa, Peña volvió a ser cuestionada cuando el portal Arequipa Digital reveló que el hermano de la intendenta, Gerardo Peña, había sido designado como director de Prensa, tras la renuncia de su titular, Nelson Hernández. Resultó insólito que la intendenta se quejara de que todas las escisiones de su gobierno automáticamente toman estado público. Y contratacó: ¿El Frente Amplio quiere tapar sus grandes problemas económicos y administrativos difamando a intendentes del Partido Nacional?”
Un relevamiento de El Observador da cuenta de otros casos de nepotismo. “En Maldonado, el intendente Enrique Antía designó a su yerno, Andrés Rapetti, como coordinador del área educativa de la dirección de Cultura de esa intendencia. En Soriano los lazos de parentesco en las direcciones departamentales se han mantenido con el traspaso de mando –con elección mediante– del ex intendente Guillermo Besozzi al actual jerarca, Agustín Bascou Gil, quienes son cuñados.” El Observador recuerda que durante el gobierno de Besozzi “ingresó la maestra Lourdes Cerchi Gil como directora de Cultura, cargo en el que se mantiene hasta el día de hoy. Cerchi es prima hermana del actual intendente y también es prima de Marta Viera Gil, pareja de Besozzi y prima de Bascou”. En Flores, el intendente Fernando Echeverría designó a su hermano Leopoldo como coordinador general de la comuna. Y en Salto, Intendencia en manos del Frente Amplio, Andrés Lima designó a su pareja como subdirectora de Gestión Humana.
El carnaval de designaciones de familiares del intendente Pablo Caram en Artigas y la amplificación que tuvo en los medios, cuyos detalles se consignan en una crónica principal, hizo detonar el contrataque. Mientras Alianza Nacional anunciaba que pedirá explicaciones al intendente Caram, el senador Luis Lacalle Pou extendió un cheque de apoyo a su correligionario –recientemente reclutado–, y el presidente del Partido Nacional, el senador Luis Alberto Heber, se preguntó: “¿Por qué Vázquez sí y Caram no?”, aludiendo a la ya antigua designación del hermano del presidente, Jorge Vázquez, como subsecretario del Ministerio del Interior. Inmediatamente después saltó el nombre del ministro de Economía, Danilo Astori, cuya pareja tiene un cargo en ese ministerio.
Las reacciones de muchos de los altos funcionarios cuestionados por las designaciones de sus parientes tuvieron un denominador común: ¿por el hecho de ser pariente debemos privarnos de la colaboración de alguien idóneo para el cargo? La pregunta se formula en genérico, porque no todas las designaciones de parientes pueden justificarse en la idoneidad, pero de hecho plantea el asunto.
Fue el presidente de la Jutep (Junta de Transparencia y Ética Pública), Ricardo Gil Iribarne, quien puso los puntos sobre las íes. Recordó que el decreto que refiere a la prohibición de designación de parientes limita expresamente esa prohibición a padres, hermanos y esposos del titular de la repartición. En ese sentido las designaciones de primos del intendente de Artigas o de yernos en la Intendencia de Maldonado no significan una violación a la norma. Pero puntualizó: “Si yo designo a trece primos míos en la Jutep no estoy cometiendo una ilegalidad. Pero sí una aberración ética”.