El 26 de marzo de 2020 la pandemia de covid-19 llevaba tan sólo 13 días entre nosotros, conceptos como nueva normalidad y libertad responsable eran novedosos, tanto como la nueva administración, que se acercaba a su primer mes de gobierno.
La ingeniería de las designaciones dentro de un gobierno de coalición entre cinco partidos fue uno de los temas centrales en la agenda previa al 1 de marzo –antes también de que la pandemia se llevara todas las miradas–. El 26 de marzo, justamente, el Directorio de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) designó al coronel (r) Eduardo Pin Bascou como adjunto del vocal del Directorio, el también coronel (r) Enrique Montagno, enviado a ese órgano como una de las designaciones de Cabildo Abierto.
Pin Bascou, coronel del Ejército Nacional entre 1974 y 2010, instructor de tiro y comandante entre 2005 y 2006 de las misiones uruguayas en Haití, ingresó con una carga horaria de 40 horas semanales y tardó aproximadamente nueve meses en designar a su hija, la licenciada Serrana Pin Nadal, como secretaria del vocal del Directorio, el coronel Montagno. Según la resolución a la que tuvo acceso Brecha –fechada el 3 de diciembre de 2020–, la licenciada Pin «cuenta con el perfil necesario para desempeñar la tarea».
