Esto está muy Shanghái

I. En
apariencia, y según se consigna sobre el final de Viajar no lleva a ningún
sitio (2019), la raíz de la monumental obra o conjunto de obras literarias
llamado Proyecto Shanghai surge con la escritura del poema dramático homónimo,
“Shanghai”, de 2010. Pero quien se haya adentrado en la lectura de la obra de
Gabriel Peveroni (Montevideo, 1969) podrá vislumbrar el origen, al menos en un
nivel incipiente y fermental, en la novela El exilio según Nicolás
(2004).

Viajar
no lleva… retoma casi
todos los nombres de los personajes principales de El exilio… (¿sólo los
nombres?), y, además, ya en aquella novela se tematizaba algo que, una vez
ingresados en la lectura del Proyecto Shanghai, veremos que se vuelve uno de
los ejes cruciales de la literatura de Peveroni: el sitio geográfico (pero
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