En marzo de 2004, el politólogo César Aguiar vaticinó la desaparición del Partido Colorado (PC), porque había perdido progresivamente su base de reclutamiento y no había logrado «socializar» a los nuevos electores: «La clave del problema es que ya no hay mecanismos en la sociedad que generen identidad colorada», alertaba (La República, 26-III-04).
Veinte años después, el histórico partido aún pervive y es uno de los socios de la coalición gobernante, pero enfrenta una elección que puede ser clave para su futuro. Por estos días, en las proyecciones de las encuestas, su intención de voto oscila entre el 5 por ciento y el 10 por ciento, lejos de los registros de antaño. Esto lo ubica en el tercer lugar de la carrera electoral, más cerca del cuarto puesto y muy lejos de ser una opción real de ...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate