Con más de 40 mil desaparecidos en las últimas dos décadas, el Estado mexicano desatiende la falta de infraestructura necesaria para identificar los restos humanos encontrados. En Veracruz, las familias explicaron a Brecha por qué se necesita un mecanismo extraordinario para esta tarea y “toda la ayuda internacional posible”.
Hace cuatro
años, cuando un grupo de familiares de personas
desaparecidas lanzó, sin apoyos oficiales, la Primera Brigada Nacional de
Búsqueda para rastrear predios rurales señalados como sitios de enterramientos
clandestinos en Amatlán, un municipio al extremo sur de Veracruz, en el extremo
norte del estado, un puñadito de seis familias con desaparecidos decidió que
ellos replicarían ese esfuerzo. En mayo de 2016, en la ciudad de Poza Rica, se
presentaron como ca...
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