—«La esclavitud significó un genocidio, no fue solo la violencia física, sino cultural, la intención de borrar quién sos vos de forma sistemática, desde cambiar tu nombre, tu religión, hasta cambiarte todo lo que sea tuyo», dice Alex Borucki, uno de los principales historiadores de la trata esclavista en las Américas. Su trabajo se desarrolla hoy en la Universidad de California, Irvine, donde es jefe del Departamento de Historia, pero comenzó en Uruguay en la década del 90, cuando publicó su primera investigación junto con las historiadoras Karla Chagas y Natalia Stalla. La conversación de Brecha con Borucki –recién llegado de Estados Unidos– tuvo como eje el aporte fundamental de la mano de obra esclavizada en la economía oriental, una realidad que la sociedad uruguaya todavía niega.
—¿Se...
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