Es factible,
 como sostienen algunos referentes de organizaciones
 de derechos humanos, que la recurrente difusión de fotografías en las redes que
 muestran al coronel (r) Pedro Mato Narbondo en actividades sociales, tanto en
 la ciudad de Rivera como en Santana do Livramento, tenga, en definitiva, un fin
 provocador: “Mi impunidad es inextinguible”, parece decir el Burro Mato
 haciendo la plancha en una piscina, posando con amigos en un asado o asistiendo
 a un cumpleaños con su esposa Juliana de Sarro. Las secuencias de fotografías
 que en conjunto ofrecen una sensación de despreocupación, de vida cómoda, sin
 estrecheces ni temores, son sin duda un mensaje, y el hecho de que esa vida
 regalada se esté registrando desde hace años confirma que este terrorista de
 Estado se siente lo suficientemente ...
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