En una semana el oficialismo logró aprobar dos de sus más importantes y polémicas reformas. El Congreso votó una ley que reduce las jubilaciones y otra que modifica el sistema impositivo, mientras afuera cientos de miles de argentinos desafiaban la represión en las calles. Los heridos y detenidos en esas movilizaciones, y los cacerolazos que las sucedieron, recuerdan el estallido de diciembre de 2001 que hizo caer al gobierno de Fernando de la Rúa.
El gobierno conservador de la alianza Cambiemos busca a toda costa que el Congreso nacional apruebe un paquete de leyes controvertidas antes de que concluya el año, para comenzar 2018 con otro aire.
Mientras los proyectos de ley eran debatidos en maratónicas sesiones parlamentarias, fuera del Congreso en Buenos Aires el panorama era cualquier co...
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