La mañana estaba soleada y tranquila en el Cordón. La calle Jackson estaba cortada desde temprano, y una mesita con militantes del SUNCA recogía las firmas de quienes se acercaban a último momento, que no eran pocas. La noche anterior había trascendido que se había alcanzado el objetivo de las 700 mil firmas, pero faltaba la confirmación oficial. Mientras llegaba gente desde todo el país arrimando las últimas papeletas en cajas, carpetas y sobres, el clima en la sede del PIT-CNT se empezaba a poner festivo. Sobre las 12 llegó Rafael Michelini y dijo: «Cuando digamos el número, se les van a caer las lágrimas; es increíble el pueblo uruguayo».
La conferencia de prensa fue en el salón de actos, que estaba adornado con tres carteles que decían: «La LUC es concentradora», «La LUC es privatizado...
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