Los primeros días del gobierno cívico-militar de Jair Bolsonaro dejaron un número suficiente de pronunciamientos y decisiones como para plantear que Brasil se encamina hacia un nuevo “orden” fundado en falsedades. Estas son tan desmesuradas como que el 1 de enero llegó a su fin el yugo comunista que azotó al país en últimas tres décadas. En ese período gobernaron dos derechistas como José Sarney (1985-1990) y Fernando Collor de Mello (1990-1992), y el socialdemócrata neoliberal Fernando Henrique Cardoso (1995-2003).
Fue una falsedad aceptada como si fuera una verdad bíblica por miles de bolsonaristas reunidos en la Plaza de los Tres Poderes, de Brasilia. El público –mayoritariamente blanco, de clase media, entre el que había muchos con camisetas de la selección brasileña– estalló cuando el...
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