Un funcionario que llegó a ocupar altos cargos en el Ministerio de Defensa (Mdn) cuenta que los comandantes en jefe, cuando son destituidos, suelen preguntar cuánto tiempo tienen para abandonar el despacho. Es de suponer que el comandante del Ejército, ahora retirado, Guido Manini Ríos no hizo esa pregunta y se tomó todo el tiempo del mundo para despedirse con la última provocación. Así, pudo montar su última producción con recursos públicos y filmarse durante nueve minutos para despacharse sin tapujos sobre todos sus conflictos con el presidente de la República y para enarbolarlos como estandarte de lo que será su casi segura entrada a la política partidaria. Si algo no le faltó a Manini, un militar con un linaje de varias generaciones de políticos que ocuparon importantes cargos en gobie...
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