Entre quienes ven ese capítulo final de las «guerras yugoslavas» como un parteaguas figuran periodistas que las cubrieron y que asistieron atónitos a una ofensiva que se presentaba como «humanitaria» y que acabaría borrando del mapa escuelas, hospitales, viviendas, edificios públicos, fábricas, sedes de canales de televisión, una embajada y todo tipo de infraestructuras a lo largo de 79 días de destrucción sistemática y castigo a un país –Serbia– que no encajaba en el nuevo orden mundial que se estaba consolidando tras el desplome de la Unión Soviética. La operación Fuerza Aliada, así la llamó la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), culminó el 11 de junio de 1999 con alrededor de 2.500 muertos en filas serbias y ninguno entre los soldados de la alianza atlántica. Sobre Belg...
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