Gabriel García Márquez“Fue un escritor que no sólo era leído, sino amado”, la frase repetida con variantes estos días tal vez sirva para explicar la temperatura emocional y las dimensiones del duelo que provocó la muerte de Gabriel García Márquez, ocurrida el 17 de abril.
El mundo, o las redes que simulan el mundo, despidieron a “Gabo” con un dolor a la vez íntimo y desbordado. Tanto los periodistas en las páginas de la prensa como anónimos lectores en el ejercicio interactivo que promueven los medios, dieron testimonio en clave autobiográfica. Sumaron confesiones y recordaron escenas de lectura inaugurales, algo del rubro de “el día que conocí a García Márquez”, o en el que lo leí por primera vez o cómo robé un libro suyo. No me burlo. No encuentro nada reprobable en ese duelo ...
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