Dos películas que coinciden en la cartelera tienen, además, elementos comunes que justifican que se hable de ellas en una misma nota. No está de más prestar alguna atención a lo último de Joe Wright y Steven Spielberg, y a lo que tienen para decir sobre Churchill y el papel de la prensa en la guerra de Vietnam, respectivamente.
El Oscar tiene esas cosas. Por un lado, siempre le presta atención a, dicho sin falta de respeto, “los temas de la agenda”: este año hay entre las candidaturas a mejor película una historia de gays (Llámame por tu nombre), otra con afroestadounidenses (¡Huye!) y dos sobre mujeres peleadoras o maltratadas (Tres anuncios por un crimen, Lady Bird). También hay una anomalía (La forma del agua, de Guillermo del Toro) que tiene posibilidades de ganar aunque practique un g...
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